Este jueves, las administraciones de ambos países anunciaron la creación de tres centros en Soacha, Medellín y Cali para que los demandantes de refugio de Cuba, Haití y Venezuela puedan presentar sus solicitudes en el marco de un nuevo plan de movilidad migratoria.
“El Gobierno de Colombia no intervendrá en el proceso, dado que los asuntos relacionados con las vías de migración hacia Estados Unidos son discrecionales de ese Estado y dependen de sus políticas migratorias internas”, agregó la Cancillería.
En estas tres ciudades, los Puntos de Movilidad estarán ubicados en los Puntos de Atención y Orientación (PAO) de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y los Puntos de Referenciación y Orientación (PRO) de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), quienes se encargarán de procesar las solicitudes.
Aunque se acordó en las conversaciones que la plataforma de Movilidad Segura no recibirá solicitudes de ciudadanos colombianos, se acordó que ambas naciones trabajarán en la ampliación de las oportunidades legales para que los ciudadanos colombianos viajen, estudien, vivan y trabajen en los Estados Unidos.
El 7 de julio pasado, el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos dio a conocer un primer resultado de estas conversaciones, ya que se implementaron nuevos procedimientos para otorgar permisos humanitarios de reunificación familiar a ciudadanos colombianos.
Ambas administraciones «llegaron a un acuerdo para desarrollar, por un período de seis meses, la fase exploratoria de la iniciativa “movilidad segura”, agregó la cartera en un comunicado, donde indicó que el primero de estos Puntos de movilidad segura empezó a funcionar el 1 de agosto en Medellín.
Además, informaron que en septiembre se reanudará la actividad del Grupo de Asuntos Consulares Colombia-Estados Unidos, un organismo binacional establecido en 2006 para conversar temas como las visas de estudiante y los trabajadores temporales para que los colombianos puedan viajar y quedarse de manera regular durante este nuevo encuentro entre las autoridades colombianas y estadounidenses.
Finalmente, Washington ofrecerá ayuda económica y técnica a Bogotá con el objetivo de mejorar las habilidades de la autoridad migratoria.
Durante el mandato del expresidente Donald Trump (2017-2021), esa norma permitió más de 2,5 millones de expulsiones de migrantes desde que entró en vigor en 2020 con el pretexto de la pandemia.
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